Con el argumento de que el 32 por ciento del valor del galón de gasolina corresponde al pago de impuestos, la contralora delegada para asuntos energéticos, Claudia Isabel Medina, dijo que es necesario ponerle un tope a la carga tributaria del combustible, debido a la volatilidad internacional de los precios del crudo.
Durante un debate en el Congreso, explicó que la gasolina está gravada con tres impuestos: global, sobretasa e IVA y que es un esquema de precios en el que se está cobrando impuesto sobre impuesto, lo que será objeto de análisis por parte del organismo de control.
Pero Medina no sólo criticó la política de precios, pues también mandó dardos contra las acciones gubernamentales para enfrentar otros inconvenientes del sector.
“También hemos registrado que ninguna política pública ha atacado problemas como el hurto, contrabando y prácticas nocivas como la manipulación riesgosa de combustibles”, dijo.
El debate por el precio de los combustibles se revivió en el país luego de que el Ministerio de Minas y Energía autorizara para el mes de marzo un incremento en el galón de 210 pesos.
Otro de los funcionarios presentes en el debate fue el director de la Unidad de Planeación Minero Energética (Upme), Óscar Uriel Imitola Acero, quien también objetó algunas de las medidas adoptadas en el pasado y que beneficiaron a grandes empresas del sector minero con millonarios subsidios.
“Entre el 2005 y el 2010 se beneficiaron en cerca de 313.000 millones de pesos 37 empresas del sector minero por una exención que afortunadamente fue derogada con la Ley 1430 del 2010”, explicó el funcionario, quien agregó con los subsidios otorgados en el transporte de crudo se pudo haber construido hace rato la red de oleoductos que el país necesita hoy con urgencia.
La Upme también recomendó la creación de incentivos que compensen a las compañías la creación de almacenamientos estratégicos de combustibles en el país en caso de imprevistos. “La propuesta es crear un inventario operativo que garantice el abastecimiento entre 10 y 15 días por posibles contingencias y un inventario o almacenamiento estratégico que ofrecería suficiente gasolina y diésel por más de 15 días”, dijo.
Dicha iniciativa cobra mayor valor teniendo en cuenta varios aspectos como la volatilidad del mercado internacional y el reciente caso de Japón, que ha visto seriamente comprometidas la refinación por el terremoto y el tsunami.
Para evaluar el impacto fiscal que representa la actual estructura de precios de los combustibles, la Contraloría contrató un estudio que estará listo en el primer semestre del año y que busca darle alternativas al Ejecutivo para reducir la volatilidad en los precios y afectar menos los usuarios.
Con pozos viejos debía ser barato
Con respecto al precio de los combustibles en el país, el senador Luis Fernando Velasco insistió que cada vez es más barato producir gasolina y diésel en el país teniendo en cuenta la nueva tecnología para producción y buena parte de los pozos son viejos, es decir, que cuentan con una infraestructura ya montada y pagada. Al respecto, el director de la Agencia Nacional de Hidrocarburos, Armando Zamora, afirmó que de los 850.000 barriles de petróleo y gas que se extraen a diario en el país, cerca de 760.000 corresponde a pozos viejos o antiguos y que sólo 90.000 se derivan de contratos recientes.
