Más de 100 proyectos requirieron, en el 2017, información adicional en materia ambiental, lo que llevó a que finalmente se les diera luz verde en este panorama, ya sea para la etapa de preconstrucción o construcción.
Un informe de la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (Anla) revela que exactamente la mitad de estas iniciativas corresponden al sector de infraestructura vial (51), mientras que 18 se realizaron para temas energéticos, otras 18 para hidrocarburos, 9 para minería y 6 más para agroquímicos.
“Para complementar información (...) la Anla puede acudir al procedimiento de solicitud de información adicional, para el cual en el 2017 se realizaron 102, número que se constituye en un récord desde que se implementó este instrumentos”, dice la entidad.
Asimismo, detalla que la figura fue creada en el 2015, que puede aplicar en cualquier proyecto de su competencia, independiente de su tamaño o ubicación, y que es clave pues el estudio ambiental puede ser variable entre una visita y otra a las obras.
“Hay casos relevantes aunque todos tienen su importancia, como el requerido a Minesa, la compañía interesada en la explotación de oro en Soto Norte (Santander). Se le hicieron 83 requerimientos; o como el del proyecto Segunda Calzada Popayán-Santander de Quilichao, Unidad Funcional I, con 30 exigencias”. El primer caso aún no está en operación, mientras que la concesión de cuarta generación (4G) se encuentra en etapa de preconstrucción, porque –además– tiene procesos de consultas previas pendientes.
Sumado a lo anterior, el concesionario asegura que solo puede empezar cuando tenga todas las unidades funcionales con las consultas protocolizadas, debido a temas de desembolsos crediticios.
MÁS REVISIONES
Ahora, volviendo al informe de la Anla, dicha entidad señala que “en caso de requerirse, el solicitante de la licencia, su representante legal o apoderado deberá concurrir a reunión citada mediante oficio en la que se establecerá la información adicional que se requiera para efectuar un completo análisis del trámite de licencia ambiental”, dice Franklin Guevara, experto del tema.
“Actualmente, este mecanismo se rige por el decreto 1076 del 2016 y es fundamental en todo el proceso de evaluación del licenciamiento”, señala Edilberto Peñaranda, abogado de la Anla, quien recuerda que en 2015 se llegó a 65 solicitudes y en 2016 a 90.
FRENOS
Es importante recordar que la Autoridad de Licencias Ambientales también puede frenar este tipo de procesos, tal y como pasó la semana pasada con la autovía Bucaramanga - Pamplona.
“Hay áreas protegidas por donde va a pasar el trazado que requieren que se expidan unas resoluciones por parte de las autoridades competentes, una de parte de la CDMB (corporación autónoma) que tiene que expedir una resolución para excluir un área ambientalmente protegida. (…) La otra que debe expedir el Ministerio de Ambiente, sobre una veda de unas especies sobre el mismo trazado que no se han expedido”, declaró Luis José Escamilla, personero de Floridablanca.
Los análisis de qué hacer en este corredor seguirán siendo materia para esta entidad y las autoridades locales.