El ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas, redujo la meta crecimiento del PIB colombiano de este año a un rango entre 1,7 y 1,9%, con un 1,8% como meta puntual, desde 2% previo.Esto tras conocer el dato de crecimiento económico del tercer trimestre del año, que según el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane) fue de 2%, por debajo de la proyección de 2,4% que tenía el Gobierno.
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"El panorama económico hacia adelante es mejor, más positivo", dijo el ministro a medios de comunicación, por lo que mantuvo la meta de 3% para el 2018.
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De acuerdo con José Manuel Restrepo, rector de la Universidad del Rosario, el 2% de crecimiento en el tercer trimestre es señal de que "el segundo semestre no ha sido tan bueno como se esperaba. El Gobierno Nacional había hablado de una tasa de crecimiento para el 2017 del 2%, siempre dije que eso no era posible, empezando por que el primer semestre dio en promedio 1,25%, con este dato estamos en 1,5% en promedio para los tres primeros trimestres. Esto quiere decir que, si lográramos tener la misma tasa de crecimiento o ligeramente por encima en el cuarto trimestre, estaremos cerrando el año entre 1,6 y 1,8%, y lo que eso significa es que este año sería peor que el año anterior, cuando el PIB fue de 2%".
Para el cuarto trimestre del año, el ministro Cárdenas espera que el PIB se expanda un 2,5% frente a igual periodo del año previo.
En relación con el crecimiento de la economía entre julio y septiembre, Camila Pérez, directora de análisis macroeconómico de Fedesarrollo, afirma que la cifra de 2% está de acuerdo con lo esperado, ya que el centro de estudios económicos pronosticaba 2,1%.
La analista destaca el buen comportamiento de la agricultura, con un alza de 7% desde comienzos de año, los establecimientos financieros, servicios y la recuperación del comercio, especialmente restaurantes y hoteles, que frenaron su caída debido a las menores tasas de interés y una baja inflación. Entre los sectores que se recuperaron figuran el suministro de gas y electricidad.
Explica que el buen comportamiento del sector agrícola se debe al cultivo del café debido a unas mejores condiciones climáticas, productividad y a que el año pasado se vio muy afectado por el fenómeno de El Niño.
A Pérez le preocupa la caída de la construcción de edificaciones, que bajó un 16%, y que fue compensado el sector por la construcción de obras civiles. La industria cayó menos de lo que lo había hecho en el primer trimestre, mientras que la producción de gas y petróleo crecieron.
La directora de análisis macroeconómico agrega que el centro de estudios no va a cambiar su proyección de crecimiento para la economía de final de año, la cual han cifrado en 1,7%, pero si se va a revisar algo de la composición sectorial, mientras que para el año entrante continúa con un estimado de 2,4%.
Por su parte, Jonathan Malagón, vicepresidente de Asobancaria, señaló que los datos revelados por el Dane ratifican las perspectivas de la agremiación financiera en materia de actividad productiva.
“Los resultados hablan de una expansión en el tercer trimestre en torno al 2.0%, muy en línea con nuestro estimativo de 2.1%, lo que permite constatar la recuperación de la actividad económica local frente al débil crecimiento del primer semestre, cercano al 1.2%”, indica Malagón.
Coincide con Fedesarrollo en destacar el dinámico comportamiento de la agricultura, y al igual que al centro de estudios económicos, le inquieta el desempeño del sector de la construcción, que se contrajo 2.1% dada la fuerte caída del subsector de edificaciones, que alcanzó -15.9%, el peor nivel en la última década.
Malagón destacó al aporte al PIB hecho por el sector de establecimientos financieros. Explicó que se vio “un notable crecimiento de 3.2%, jalonado por el buen desempeño del sector de intermediación (6.8%). Con este resultado, continuamos siendo el sector de mayor contribución al crecimiento económico, aportando más de la 3ra parte de la expansión del PIB”.