La Administración de Información de Energía (EIA) de Estados Unidos redujo ayer su pronóstico para el crecimiento de la demanda mundial por crudo durante 2018 en 60.000 barriles de petróleo por día (bpd), dejando la previsión en 1,66 millones de bpd.
En cuanto a las estimaciones para el próximo año, la EIA también recortó sus proyecciones. Según la entidad, el cálculo del crecimiento de la demanda mundial se reduciría en 140.000 bpd, quedando en 1,57 millones de bpb para 2019.
Además de hacer las proyecciones mundiales, la EIA también anunció que la producción de petróleo de los Estados Unidos crecerá en 2018 a un ritmo más lento que lo previsto anteriormente, según el cálculo mensual emitido ayer por la agencia del Gobierno.
En ese sentido, el reporte de la EIA indicó que la producción de petróleo estadounidense subiría en 1,31 millones bpd a 10,68 millones de bpd en 2018, una cifra menor al cálculo de julio, que indicaba que se esperaba un alza de 1,44 millones de bpd, a 10,79 millones de bpd.
Bloqueos a Irán
La publicación del informe de la EIA se hace en medio de las disputas que tiene el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, con Irán. Incluso, el mandatario amenazó ayer a los países que sigan comerciando con Irán tras el restablecimiento de sanciones, que calificó como “las más duras” jamás aplicadas, que provocan desde hace días inquietud en la sociedad iraní y por las que Rusia se declaró “profundamente decepcionada”. Por otro lado, en Irán, el rechazo a estas sanciones es general, tanto de parte del gobierno, como de los mismos ciudadanos.
Cabe recordar que Estados Unidos decidió imponer medidas punitivas a la República Islámica luego de anunciar en mayo su retiro unilateral del acuerdo del programa nuclear iraní, alcanzado en 2015 con las grandes potencias. Con eso, las sanciones entran en pie oficialmente.