A pesar de que Boyacá no es un departamento en el que destaque su industria cafetera, la iniciativa Café Boyacá quiere impulsar esta industria, la cual ya alcanza a 37 municipios en la zona. Wilder Buitrago, su gerente General, afirma que este tiene un alto potencial de producción y exportación y pone de relieve las principales barreras.
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¿En qué consiste Café Boyacá?
La iniciativa surge de la necesidad de identificar un distintivo para los caficultores boyacenses y su objetivo es promover soluciones fomentando el consumo del café y visibilizando su producción en busca de posicionamiento. Café Boyacá es una empresa dedicada a la comercialización de Café Especial y tradicional cultivado en el departamento.
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¿Cómo es la situación de los cafeteros en Boyacá?
La situación cafetera está en cierto abandono en los municipios desde la institucionalidad. La producción de kilos por hectárea es de bajo volumen, aunque se ha confirmado la calidad en altos perfiles en taza. Otro factor radica en que el desplazamiento de los jóvenes a las ciudades lo cual ha generado que cada vez más exista menos capital humano, por lo que escasea la mano de obra para el café. Este se cultiva en siete provincias de Boyacá, en 5 regiones donde para el año 2017 hubo un total de 975 hectáreas improductivas, y un total de 9.583 hectáreas productivas dentro de sus diferentes municipios.
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¿Cuál es la producción actual y su potencial real?
En el 2017 se cosecharon 8.065.974 kilos de café en Boyacá, en alrededor de 37 municipios, siendo Moniquirá de la provincia de Ricaurte el mayor productor con 1.091.973 kilos y Zetaquirá con 925.354 kilos como segundo. Su verdadero potencial es mucho más alto y se está desaprovechando por factores como los costos de producción, la escasa aplicación de tecnologías, las vías de acceso en mal estado o carencia de asistencia técnica, entre otros. La producción afronta problemáticas que obstaculizan y limitan esta actividad.
¿Cuáles son las mayores barreras para su desarrollo?
Una de las principales es que ha sido desatendido desde las instituciones, centrando sus mayores esfuerzos y apoyo a los centros de mayor producción como el Eje cafetero, Huila, Cauca, Antioquia y demás. Además, el café en el departamento tiene problemas de productividad, en gran parte son cultivos viejos, no tecnificados y con cultura tradicional, lo que hace que se obtenga bajos rendimientos. El potencial cafetero en Boyacá es subutilizado.
¿Qué características tiene el café de Boyacá que podrían impulsar su éxito?
Tiene la particularidad de que se produce a diferentes climas, alturas, pisos térmicos y regiones, lo que le da características que garantizan cultivos de tipo transitorio y en algunos municipios producción permanente. Por esto, su aroma, la acidez y el cuerpo que se acentúa en el grano por ser producido por encima de los 1.600 hasta los 2.100 metros.
¿Tiene potencial para ser una región exportadora?
Si, el café de Boyacá ya se está exportando al mercado asiático con una cantidad aproximada de 2,5 toneladas y a las islas del Caribe en un único envió de 10.000 kilos en 2017, que han sido aceptados en estos mercados por su calidad.
¿Ha obtenido apoyo de la Federación o de las autoridades del país?
Desde la Federación de Cafeteros se ha recibido información estadística relevante para identificar las oportunidades, fortalezas, amenazas y debilidades presentes en la producción cafetera de Boyacá; también por medio de la gobernación a través de la secretaria de productividad.
Desde el Sena se ha desarrollado acompañamiento a la iniciativa ante Fondo Emprender, a través del cual se percibieron recursos para ejecutar la propuesta.
¿Qué tan competitiva puede ser Boyacá frente a otras regiones con más tradición cafetera?
El café de Boyacá tiene muchos retos para alcanzar un verdadero reconocimiento dentro del país. Definitivamente debe fortalecer sus cultivos, empoderar a su gente, su sistema asociativo y su sistema de venta.
Tal vez pasen años para lograr tal objetivo, sin embargo, desde la gobernación de Boyacá, apoyados por el Sena se le ha dado importancia y por medio de diferentes estrategias y el café de Boyacá ya empezó a buscar el reconocimiento que históricamente ha dejado de tener.
rublop@eltiempo.com