A las semillas, los fertilizantes, los plaguicidas y la maquinaria agrícola se ha sumando un nuevo insumo: las tecnologías de la información y la comunicación (TIC).
Estas son las que están cambiando radicalmente la forma de producir en el campo. ¿La razón? Puede saberse con antelación, entre muchos otros aspectos, cómo está el mercado (oferta y demanda) y cuál será su comportamiento en el futuro inmediato o a mediano plazo.
Lo anterior se resume en una sola palabra: información.
En Colombia, las TIC para el sector rural productivo están disponibles desde hace una década, cuando el Centro Internacional de Agricultura Tropical (Ciat) puso en marcha tres ‘telecentros’ en el distrito de Aguablanca (Cali) y en los municipios de Piendamó y Santander de Quilichao, en Cauca.
Ahora, programas similares se ejecutan en el país, como resultado de los proyectos de masificación de Internet de los gobiernos nacional, departamental y municipal.
La más reciente iniciativa la puso en marcha la Federación Nacional de Cafeteros en Piendamó, donde inició el piloto de lo que serán 68 centros de conectividad, en igual número de municipios.
Cada uno de estos centros contará con conexión satelital a Internet y estarán dotados con cinco equipos de cómputo, con un canal de banda ancha de seis megas.
La primera fase del proyecto es resultado de una alianza entre el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y la Federación, en el marco de la estrategia de Denominación de Origen del café colombiano, que pretende beneficiar a 85.000 productores de ocho departamentos.
Ahora, un proyecto de mayor envergadura comenzó a gestarse en la Sociedad de Agricultores de Colombia (SAC), de la mano del programa Computadores para Educar, que pretende masificar el uso de las TIC en el sector agrario, en todo el país.
“Comenzaremos a hacer convenios con las empresas que prestan estos servicios (telefonía e Internet), para que los productores logren tarifas subsidiadas por el Gobierno Nacional”, dijo Rafael Mejía, presidente del gremio agrario.
Los objetivos del interés de la SAC por masificar las TIC son ofrecer información en tiempo real, recibir retroalimentación de los agricultores y eliminar los intermediarios en la comercialización de los alimentos, cuyo único aporte es a la carestía.
“La masificación tecnológica en el campo es una prioridad para aumentar la productividad y mejorar la calidad de vida de sus pobladores”, concluyó el presidente de las SAC.
Adicional a lo anterior, junto con los gremios de la producción y las entidades del sector (ICA y Corpoíca, entre otras), se busca que la gente optimice el uso de esas tecnologías con programas de administración que permitan llevar registros de la producción y de las cuentas de la finca.
JUAN CARLOS DOMÍNGUEZ
Redactor de Economía y Negocios