Ayer, en la Embajada de Colombia en Washington casi no había quien contestara el teléfono. Los funcionarios estaban en el Capitolio repartiendo una rosa colombiana a cada uno de los 535 legisladores estadounidenses.
Practicantes y funcionarios fueron removiendo las espinas, y amarrando una pequeña tarjeta con la bandera colombiana en la que decía: “Estas Pascuas y el Día de la Madre, las flores que enviarán a sus seres queridos costarán más que en años pasados. ¿Por qué? Porque el Atpdea expiró este 12 de febrero y esto ha puesto en riesgo cientos de miles de trabajos tanto en Colombia como en Estados Unidos. Por favor, extiendan el Atpdea de inmediato”.
“En general, la gente fue muy amable. Un congresista nos dijo que se la llevaría a su esposa y que trabajaba duro para lograr la extensión de Atpdea”, dijo uno de los funcionarios que participaron en la operación.
Sergio Gómez Maseri
Corresponsal de EL TIEMPO