El desarrollo de las ciudades y las regiones empieza por A, de Agua potable; y la competitividad regional se logra con la integración de las características del territorio, la infraestructura física, la oferta de servicios, la dinámica económica, la capacidad de sus técnicos y profesionales, y la confianza que construyan sus gobernantes. En las diferentes variables de esta ecuación se trabaja activamente. Ellas reflejan, además, los tres pilares del gobierno de Santos, ‘Paz, equidad y educación’, desde y con las regiones, para mejorar el bienestar de los colombianos.
En el sector de agua se han hecho esfuerzos que dan respuesta al crecimiento del 18,1 por ciento del sector vivienda. Es así como en los últimos cinco años, en agua y saneamiento se han invertido 5,6 billones de pesos, de los cuales se han terminado 837 proyectos por 1,4 billones, y se están ejecutando 870 proyectos por 4,2 billones de pesos, beneficiando a 4,5 millones de colombianos con el servicio de agua y a 4,6 millones con el alcantarillado.
Ciertas ciudades y regiones de nuestro país, en donde el servicio de agua aún no está resuelto, demandan especial atención y soluciones innovadoras, pues la falta de agua potable está frenando su desarrollo. Es el caso de Santa Marta, en donde, en el corto plazo, se construyen pozos adicionales a los existentes para darle respuesta a la emergencia que se vive hoy por el fuerte verano, en el mediano plazo se construirá la planta que abastecerá a la ciudad por medio de las fuentes de los ríos Toribío y Córdoba. Para la solución definitiva que satisfaga su crecimiento, Findeter y Metroagua conjuntamente con la Universidad de los Andes proponen una solución innovadora, trayendo el agua del río Magdalena a través de una conducción en profundidad de 35 kilómetros, reduciendo ostensiblemente la distancia, manejando el impacto al medioambiente y contribuyendo a la sostenibilidad del servicio. Otro caso, es el de la isla de San Andrés, en donde se está evaluando las condiciones de los dos acuíferos para construir una planta desalinizadora con recursos del Gobierno, por medio de un crédito con el Banco Interamericano de Desarrollo.
De igual manera, se resolvieron situaciones que históricamente afectaban a varias comunidades. En El Carmen de Bolívar, por ejemplo, sus habitantes cuentan hoy con el servicio de agua potable gracias al programa ‘Agua para la Prosperidad’. Después de más de 30 años sin el preciado líquido, se instalaron 116 kilómetros de tubería entre conducciones y redes de distribución, distancia similar a la que hay entre Barranquilla y Cartagena, que llevan el agua a los carmeros.
El sector de agua tiene retos por afrontar y desafíos por resolver. Entre ellos: plantear soluciones innovadoras para aquellos sistemas con escasez en las fuentes, fortalecer las competencias gerenciales de sus administradores, avanzar en la protección, reforestación y saneamiento de las cuencas, fortalecer los planes de gestión del riesgo y la resiliencia en los sistemas, y trabajar con las comunidades en el uso racional del agua.
Luis Fernando Arboleda
Presidente de Findeter
