En el 2012, los medios de comunicación registraron múltiples casos de corrupción en el sector de la salud. Estos episodios, desafortunadamente, se repiten en diferentes regiones de América Latina.
La recurrencia de fraudes en negociaciones, licitaciones y contratación en las instituciones del área de la salud, deja en claro que a los gobiernos les urge establecer estrategias estatales y privadas para hacer frente a la fuerte crisis que vive el sector.
Considerando la realidad del sector de la salud en Latinoamérica, cada Estado afronta la necesidad de transformación para asegurar el uso eficiente de los recursos, y uno de los caminos es volver prioridad estratégica el proceso de adquisiciones en el área de la salud, generando políticas que propicien mayor transparencia en la gestión de compras, con lo cual, además de contribuir con la optimización en el manejo de estos recursos, se retorne a la posibilidad de mejorar la calidad del servicio que se brinda a la población.
En este contexto, es fundamental para el sector público comprender que el modelo de compra y las herramientas que se utilizan en el proceso deben estimular la transparencia y permitir que la gestión de los recursos sea realizada de forma realmente competitiva, dando acceso a tecnologías de la información con las cuales se agiliza, acerca y vuelve trazable la gestión de compras.
En Colombia, la adquisición de insumos por parte de agencias gubernamentales son en promedio el 40% del gasto total de las instituciones.
Miles de negociaciones tienen lugar al mismo tiempo, sin requisitos de calidad uniforme o referencias establecidas de los precios. Esto encarece toda la cadena de producción, genera un trabajo innecesario que descalifica a los servicios públicos y representa más costos para el contribuyente.
Las Tecnologías de la Información permiten la realización de procesos de negociación con mayor alcance y cobertura nacional, con estándares y parámetros de calidad que demanda el sector para su operación.
Actualmente, hay herramientas tecnológicas a la medida de las necesidades que el proceso requiere, y un ejemplo de ello son las compras on-line, en las cuales es posible identificar de inmediato la mejor oferta en el conjunto de proponentes generando beneficios propios, suma de sinergias y economías de escala.
Esta herramienta sencilla, amplía la competencia y documenta todas las etapas, haciendo el proceso más transparente, facilitando el análisis de los órganos de supervisión y, por supuesto, ahorrando dinero público.
En Brasil, por ejemplo, se han introducido metodologías que modernizan el proceso de compras en instituciones públicas y privadas del sector de la salud, reportando rendimientos sorprendentes.
Estos ejemplos hacen evidente que el modelo funciona y se puede aplicar a gran escala por los gobiernos estatal, departamental y municipal.
Por medio de la Agencia Nacional de Contratación Pública “Colombia Compra Eficiente”, el Gobierno trabaja en hacer más eficientes los recursos públicos, mediante la coordinación de la gestión de compras en las instituciones públicas, con el fin de lograr un ahorro que permita incrementar la inversión social en todo el país.
Este es un primer paso que abona el terreno para que el sector de la salud recupere la transparencia y la trazabilidad con resultados.
Rodolfo Scarpetta
Gerente general de Bionexo Colombia