Destinar más recursos para nutrir la salud en el país no es garantía de que esta funcione mejor; antes de eso, es necesario tener una idea certera de en qué se está yendo el gasto y cuáles son los alcances que se le quiere dar al plan de beneficios al que tienen derecho los afiliados.
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Estas fueron las conclusiones de la Mesa de Expertos en el tema que se realizó el miércoles en Medellín, en el contexto de la investigación ‘La sostenibilidad financiera del sistema de salud colombiano: alternativas y lecciones aprendidas’, que adelantan el Grupo de Economía de la Salud (GES) de la Universidad de Antioquia y el observatorio ‘Así vamos salud’. Este cuenta con el auspicio de laboratorios Roche y el acompañamiento de El Tiempo Casa Editorial. Su intención es hacer propuestas de política pública para restablecer el equilibrio económico del sector.
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Si bien la literatura internacional y los conceptos de los expertos recogidos en otro panel hecho en Bogotá hace mes y medio, en el marco de la misma indagación, indican que cualquier solución para hacer sostenible el sistema de salud pasa por allegar más recursos, los especialistas reunidos en la capital antioqueña –entre los cuales hubo representantes de la academia, laboratorios, EPS, pacientes e IPS difirieron de ese concepto y enfatizaron en que esta no es necesariamente una salida válida.
En general, hubo consenso en que es más importante controlar el gasto, logrando mayor eficiencia y transparencia. Aún así, hicieron claridad en que sí es deseable aumentar el rubro de promoción y prevención.
Las posiciones casi unificadas se sintieron también en el llamado a que el modelo de aseguramiento tenga ajustes, incentivando la corresponsabilidad entre aseguradores y prestadores, y atando el pago de los procedimientos médicos a los resultados que se obtengan con ellos.
Jorge Humberto Blanco, jefe de extensión en Salud Pública de la Universidad CES, hizo un símil del sistema con una maquina tragamonedas, de la que mucha gente saca plata, de suerte que “si le seguimos metiendo más y no transparentamos las cuentas y definimos para qué queremos el dinero, por más que metamos, la situación va a ser la misma”.
El director regional de la EPS Savia Salud, Jaime Peláez, apuntó que la crisis tiene sus matices, pues mientras las EPS registran un déficit operacional, las IPS siguen creciendo con saldos positivos y construyen más infraestructura, sobre todo para tratamientos de alta complejidad que se convierten en un desangre. Adicionalmente, el 30% del gasto del sector va a las registradoras de las farmacéuticas.
Otra necesidad señalada fue la redefinición de la UPC (Unidad de Pago por Capitación, es decir, el monto que se reconoce a los aseguradores por cada persona), pues esta es menor para el régimen subsidiado que para el contributivo, aunque el plan de beneficios es el mismo y el gasto per cápita suele ser mayor para el primero.
FALTA CONTROL
Por otra parte, advirtieron que al sistema le falta gobernanza y que el Estado debe recuperar su rol como regulador y supervisor del manejo del riesgo, controlando las tarifas y la manera como se incentiva la demanda, a veces de manera injustificada. Sobre el primero de esos ítems, el director de Metrosalud, Leopoldo Giraldo, mencionó que hay hospitales de alta complejidad que imponen sus precios y que no se explica cómo, por ejemplo, el costo en Medellín es entre 20% y 40% mayor al resto del país. “Cada cual pone los precios que quiere y los terminamos pagando los ciudadanos”, afirmó el directivo.
Estudios internacionales revisados dentro de la investigación del GES sostienen que la obtención de más recursos, de ser necesarios, debe hacerse a través de impuestos generales, no de la cotización y el copago, como es hoy. No obstante, para algunos como Gustavo Campillo, presidente de la Fundación Rasa, que representa a pacientes, ese no debe ser el camino, porque se podría desacelerar la economía y por tanto también el recaudo. En cambio, según el delegado del CES, se deben considerar aumentos en gravámenes como el de la gaseosa, que buscó el Gobierno en la última reforma tributaria, pero no pasó el filtro del Congreso.
Para Fabio Aristizábal, asesor del Centro Democrático en la Comisión Séptima del Congreso, donde se tratan, entre otros, los asuntos de seguridad social y salud, Colombia debe estimular más el gasto que hace el ciudadano a punta de pólizas privadas, para complementar el plan básico al que tiene derecho. Este está en cerca del 15%, mientras que en el mundo es de 20% en promedio, según afirmó.
“El día en que sepamos cuánto demanda el sistema de salud, ahí sí hay que definir cuál debe ser el ingreso y cuál es la fuente de financiación”, puntualizó por su parte la directora de la IPS Universitaria, Marta Cecilia Ramírez.
Néstor Alonso López López
Enviado especial, Medellín