Desde el primero de enero, el dólar en el mercado colombiano no había alcanzado un precio tan alto como el que alcanzó este lunes, cuando llegó a los $2.985.
Durante los primeros ocho meses del año, el dólar se había movido por debajo de este precio y varias veces se ubicó cómodamente por debajo de los $2.800.
(Dólar llegó a su cotización más alta en lo que va del año).
No obstante, en las últimas semanas, la moneda estadounidense empezó a ganar terreno frente al dólar y hoy se acerca a los $3.000. Sólo 15 pesos separan al billete verde de este nivel sicológico y es probable que esta semana alcance este precio promedio. Sin embargo, no se mantendría en ese nivel por mucho tiempo, indican los analistas.
Para Diego Franco, gerente de Franco Group, “lo más seguro es que hasta mitad de semana el dólar tenga presiones alcistas por la coyuntura internacional de Turquía, que finalmente envía un coletazo a los mercados emergentes, que de por sí ya han perdido bastante terreno frente al dólar”.
Sin embargo agrega, que aunque es posible que el dólar llegue a los $3.000, es probable que no se mantenga sobre ese precio, esto suponiendo que la coyuntura con Turquía finalmente se diluyera como se pronostica. Así las cosas, para el analista, más temprano que tarde, el dólar volvería a ceder terreno.
Por su parte, Orlando Santiago, gerente de Fenix Valor, señala que esta semana promete mucha volatilidad en el mercado de divisas mundial, no sólo en Colombia, por cuenta de las medidas arancelarias que Estados Unidos le impuso a Turquía, lo que ha generado temores en los mercados internacionales.
Por cuenta de esto, la percepción de riesgo ha aumentado en sólo cinco días en un 40 por ciento, razón por la cual los inversores están cautelosos con activos de renta fija y buscan refugio en el dólar.
De acuerdo con Orlando Santiago, es muy probable que la tasa de cambio llegue a los 3.000 pesos en las siguientes sesiones, pero esto sería sólo en el corto plazo, ya que al finalizar la semana, podría caer y retomar la calma.
Para la consultora Multiedro Consulting, la continua inestabilidad comercial entre Estados Unidos y China, así como la posibilidad de revivir el Referedum del Brexit y la reciente crisis Turca han intensificado las inversiones en activos refugio como el dólar.
COLOMBIA Y TURQUÍA, ECONOMÍAS EMERGENTES
La crisis económica por la que está atravesando Turquía está afectando claramente una tenue calma financiera mundial.
La Lira Turca es fácilmente la moneda más devaluada en el mundo después del Bolivar Venezolano. Esta moneda ha perdido, en lo que va de 2018, cerca un 40% con respecto al dólar.
La economía Turca es fácilmente comparable con la Colombiana, al ser economías emergentes.
Es tan así que algunos analistas de Bloomberg han listado a Colombia como una de las economías más vulnerables ante la crisis de la Lira Turca.
El ranking analizó 4 variables: déficit comercial, deuda externa, un indicador de gobernabilidad y la inflación. La combinación de estas variables ubicó a Colombia como el tercer país más vulnerable ante el actual sell-off de las economías emergentes.
Pero no todo son malas noticias, a pesar de este ranking, el Peso Colombiano ha sido una de las monedas de menor depreciación entre las economías emergentes desde que se aceleró la presión sobre la Lira.
De hecho, factores locales como la aceleración económica, inflación estable, mejora en las cuentas fiscales y externas, una baja incertidumbre política, aumento de la cotización del Brent (precio referencia para Colombia) acompañado de un aumento en la producción petrolera, han permitido que Colombia sea uno de los mercados emergentes de mejor desempeño en lo corrido de este año.
Finalmente Esteban Espitia, analista de Alianza Valores, señaló que para saber si el dólar romperá la barrera de los $3.000 habrá que estar pendiente de lo que ocurre con el precio del petróleo, que este lunes cayó, cómo será el comportamiento del Euro, que en las últimas jornadas viene cayendo y en el ámbito local, se esperan los resultados del PIB.
Así las cosas, la conclusión es que el dólar sí llegaría a los $3.000, pero no se mantendría.
