Con dos subastas y dos procesos para la asignación de energía firme del cargo por confiabilidad en el corto y mediano plazo, el Ministerio de Minas y Energía (MME), a través de la Comisión de Regulación de Energía y Gas (Creg), lanza el salvavidas con el que busca entregar energía al Sistema Interconectado Nacional (SIN).
Los procesos contenidos en tres resoluciones, que en la actualidad están publicados en la página de la Creg para comentario, plantean mecanismos y alternativas para garantizar la confiabilidad en el suministro de energía para la atención de la demanda de electricidad, más ante un escenario por el vacío de oferta que deja por el momento la no entrada en operación de HidroItuango.
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“Se trata de un ejercicio que se adelanta desde el MME y sus entidades adscritas con base en las proyecciones de demanda y en los posibles escenarios de entrada de nuevos proyectos de generación”, señala un comunicado de la citada cartera.
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Así, con la resolución 064, se busca convocar a una subasta para el abastecimiento de energía entre diciembre del 2022 a noviembre del 2023, dirigida a plantas nuevas (que no hayan iniciado obras al momento de la subasta) y plantas especiales (en construcción al momento de la asignación).
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“Pretende definir proyectos de generación de energía eléctrica con energía firme para cubrir el crecimiento de la demanda en dicho periodo, en concordancia con el periodo de planeación de 4 años establecido en la regulación”, indica la nota del MME.
A renglón seguido resalta que “como elemento adicional, se incluye un incentivo para los proyectos que puedan entrar en operación antes de esa fecha, es decir en el año 2021 o antes.
Y la resolución 065 describe el proceso para la entrega de obligaciones de energía firme del cargo por confiabilidad a plantas existentes que no las tengan adjudicadas, y a través del mecanismo de asignación administrada, para los periodos 2019-2020, 2020-2021 y 2021-2022.
Así mismo, define un mecanismo nuevo para la entrega de obligaciones de energía, pero dirigido a plantas nuevas y especiales que puedan entrar a operar antes del 2022, caso en el cual se les pagará el 90 % del Cargo por Confiabilidad.
La Creg también convocará una subasta de reconfiguración, cuya fórmula busca que los agentes puedan devolver las obligaciones, en caso de algún atraso, y las toma otro generador.
Para el MME, las propuestas regulatorias publicadas por la Creg para comentarios proponen además la realización de una subasta de reconfiguración de venta de obligaciones de energía firme (OEF) para el periodo 2018-2019.
“Este es un mecanismo contemplado dentro del cargo por confiabilidad teniendo en cuenta precisamente el balance actual de energía firme con el que cuenta el sistema”, indica el comunicado del Ministerio.
De igual manera, se presenta una propuesta de un nuevo mecanismo para promover la entrada de proyectos de generación de energía eléctrica que puedan aportar energía firme al sistema, pero que no participan en la subasta de expansión.
“El MME, la Creg y la Upme, en el marco del cumplimiento de sus funciones, continuarán analizando la evolución del sistema eléctrico”, subraya la nota.
Desde el año 2006 opera en Colombia el esquema regulatorio del Cargo por Confiabilidad, mediante el cual los generadores se comprometen a entregar un producto denominado energía firme, es decir la cantidad de energía que una planta (activo de generación) puede entregar con certeza en condiciones de hidrología muy seca.
EL ADMINISTRADOR ANALIZA ESCENARIOS
XM, administrador del Sistema Interconectado Nacional (SIN) y del Mercado de Energía Mayorista (MEM) ha realizado análisis en las últimas semanas ante la crisis de HidroItuango y la no entrada de su operación.
El regulador precisó que según la información arrojada por sus modelos de análisis, no prevé riesgos en la atención de la demanda a corto plazo.
Así mismo, XM realizó estudios en un escenario a mediano plazo que consideran de baja hidrología ante la no entrada de HidroItuango en las fechas planeadas (la primera unidad en diciembre de 2018 y la cuarta y última en agosto de 2019).
“Estos análisis indican que el SIN contaría con los recursos necesarios para la atención de la demanda y se podrían tener requerimientos de generación térmica constante en algunos periodos, superiores a 70 GWh-día”, señala el administrador.
“Con base en la información que se registra a la fecha, y con el inminente aplazamiento en la entrada en producción de HidroItuango, no se prevén riesgos en el SIN en el corto y mediano plazo; no obstante, se podría requerir mayor aporte de generación térmica”, indica XM.
Cabe resaltar que los citados escenarios analizados por el administrador se actualizarán una vez se conozca el ajuste al cronograma del proyecto HidroItuango por parte de EPM.