Con el anuncio de la suspensión temporal, por 30 días, del cierre de recepción de propuestas para la licitación de la renovación de buses de TransMilenio, se le abre la puerta a que la entidad cambie las reglas de juego, atendiendo los reclamos de la ciudadanía.
El anuncio del organismo, que fue el lunes en la noche, se hace luego de que entidades gubernamentales y de control -como la Procuraduría o la Unidad de Planeación Minero-Energética (Upme)–, distintos sectores y la misma ciudadanía, manifestaran su inconformidad con las condiciones de la licitación.
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“La suspensión se da para garantizar que los diferentes interesados cuenten con el tiempo suficiente para confeccionar sus ofertas asegurando así la selección objetiva y la pluralidad de oferentes”, informó TransMilenio en un comunicado.
Precisamente, una de las principales discusiones sobre la licitación es que no hay los suficientes incentivos para que entren buses de cero emisiones a rodar en Bogotá, pese a que TransMilenio le dio un puntaje adicional a los oferentes que propongan una flota con una tecnología Euro V o superior. Y, precisamente, ese es uno de los principales reclamos.
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En ese sentido, uno de los entes que entró a hacer observaciones fue la Procuraduría, que le solicitó a TransMilenio sustentar por qué se exige en la licitación una tecnología mínima de Euro V, cuando en los estándares internacionales la norma en vigencia es la del Euro VI. “El organismo requiere que se absuelva por parte de la entidad vigilada (TransMilenio) si los motores diésel que no pueden ser vendidos en la Unión Europea pueden por el contrario ser adquiridos para transitar por las calles de Bogotá”, indica la carta que le envió la Procuraduría a María Consuelo Araújo, gerente de TransMilenio.
EL LÍO DEL IVA
Otro de los problemas que surgieron, alrededor de la licitación, es que contrario a lo que ha estipulado el Gobierno, la flota que utiliza energías limpias (como gas o eléctrica) tendría que pagar IVA.
De hecho, Portafolio pudo acceder a una carta enviada por la Unidad de Planeación Minero-Energética (Upme) enviada el pasado jueves al despacho de la gerente de TransMilenio, en donde la entidad reitera que bajo las actuales condiciones no se “estaría cumpliendo con el objetivo de incentivar las tecnologías limpias”.
Al respecto, TransMilenio manifestó que está respondiendo cualquier observación “por parte de los órganos de control”, que hará pública en su momento.
Así las cosas, la licitación queda todavía abierta a posibles modificaciones, cosa que tendría que ocurrir en los próximos 28 días.
HASTA TUTELAS EN CONTRA
Además de las solicitudes de otras entidades gubernamentales, este diario también conoció una tutela interpuesta por un ciudadano, en la que le exige a TransMilenio respetar su derecho, y el de sus dos hijas, a gozar de un ambiente sano, a la salud y a la integridad.
Según el ciudadano, con las condiciones actuales de los pliegos definitivos para la renovación de los buses, no se está asegurando que la mayoría de la flota sea de eléctricos o de gas, sino que se le abrirá la puerta a que sean los que funcionan con motores diésel los que predominen en la licitación.
marola@eltiempo.com