Javier Lastra Fuscaldo, agente especial para el proceso de intervención de Electricaribe, no duda en afirmar que el nuevo operador de energía para los siete departamentos de la región Caribe se encontraría con un marco tarifario que responde a las particularidades propias de la región.
En diálogo con Portafolio, el funcionario reiteró que debe conocer los detalles del servicio de distribución y comercialización, y que tenga el músculo financiero suficiente para garantizar el suministro de energía en la región Caribe.
(Lea: Electricaribe, en búsqueda de una millonaria inversión)
“Esto ofrecería sin duda una confiabilidad con una distribución de calidad. Así los usuarios se percatarán de la mejoría sostenida”, reiteró.
¿Cuál es la empresa que recibiría el nuevo operador de Electricaribe?
Si se analiza como un negocio, hay que brindarle el servicio a poco más de 2.600.000 suscriptores. Es un mercado interesante y atractivo. Se encontraría con un marco tarifario que responde a las particularidades propias de la región. También, con un talento humano que posee el conocimiento para hacer todas las inversiones que se deben ejecutar para poner al día, o modernizar la infraestructura.
(Lea: Advierten riesgo en finanzas públicas si Gas Natural retoma control de Electricaribe)
¿Con respecto al servicio?
Se puede contar con un nuevo operador que conozca y entienda los detalles del servicio de distribución y comercialización. Que tenga el músculo financiero suficiente para garantizar el suministro de energía en la región Caribe. Esto ofrecería sin duda una confiabilidad con una distribución de calidad. Así los usuarios se percatarán de la mejoría sostenida.
(Lea: Aprueban recursos para compra de energía en Electricaribe)
¿Cuál sería el perfil ideal del nuevo operador?
Dentro de esta búsqueda, no hay veda para las empresas interesadas. Incluso pueden participar los acreedores, los accionistas y un tercer inversionista tanto a nivel nacional como internacional.
Lo importante es escoger la mejor alternativa en términos de conocimiento y de posibilidades de inversión de la magnitud que requiere el servicio de energía en la región Caribe.
¿Cuáles son los recursos pendientes para terminar obras de infraestructura?
Hay un documento Conpes con $125.000 millones aprobados para el fortalecimiento de seis subestaciones que son en Cereté, Montería, Manzanillo, Atlántico, Caracolí y La Loma. Son claves para la confiabilidad en el sistema de transmisión regional y que adelantó a través de convocatorias la Unidad de Planeación Minero Energética (Upme).
¿Para qué más se necesitarían los recursos?
Deben acelerarse los desembolsos de las garantías aprobadas y que aliviarían un poco la carga, ya que son justamente para no tener que pagar anticipadamente la energía que se compra a los operadores, sino más bien tener un respaldo para que estos nos despachen la energía y poderla pagar contra factura. Esto nos libera caja para más inversiones en infraestructura. Así se mejoraría el servicio, y nos permitiría comprar todos los materiales y equipos que se requieren.
¿Cuáles es el capital mínimo que debe tener en cuenta el nuevo operador?
La solución estructural y definitiva está con inversiones de $700.000 millones promedio año. Estos recursos son importantes con el marco tarifario existente. La resolución 097 no permitió tener una remuneración con esas inversiones. Pero con la resolución 015 se abrió la posibilidad de recuperarlas. Hay que tener en cuenta la capitalización que se pueda reinsertar, así como el rezago de inversiones que tiene la compañía.
Además de las inversiones que no se han podido realizar...
Electricaribe no estaría comenzado de cero con el nuevo marco tarifario, pero si con una desventaja por esa desaceleración en las inversiones de hace más de ocho años. Y esto es lo que pone en situación crítica la recuperación. Por eso la necesidad de inversiones importantes.
¿Por qué no se han podido hacer esas inversiones?
El déficit estructural que tiene la compañía no ha permitido que se hagan las inversiones importantes que se requieren. Pero precisamente, para esa misión es que se está buscando una solución estructural. Han habido semanas y meses de mucha dificultad, pero no se ha dejado cumplir alguna de las tareas para mantener la regularidad en el servicio.
¿Cómo recibiría la carga prestacional el nuevo operador?
En el tema laboral, se han pagado puntualmente todas las mesadas y salarios, así como los beneficios convencionales de los 1.450 trabajadores directos. De los cerca de 3.000 pensionados no ha habido un día de retraso. El sindicato tiene en cuenta esta situación.
¿Cuál es el balance que entregaría en materia de servicio al cliente?
Al día se presentan 800 quejas o reclamos con respecto al servicio y todas se atienden y solucionan. Si se pudieran resolver de mejora manera, se haría. Pero depende de los recursos que se necesitan para actuar con mayor celeridad. Hay que rescatar muchos temas en el proceso de intervención. Se han disminuido los tiempos de respuesta en las oficinas de atención al cliente. Han decrecido las reclamaciones en más del 10%.
¿Y en los planes de contingencia?
La capacidad de respuesta operativa se da través de 7.500 trabajadores indirectos, a través de contratistas integrales. Han estado de forma permanente apoyando el servicio. Con unidades móviles se atienden a la mayor brevedad los daños ocasionados o no ocasionados por terceros. A través de rigurosos protocolos se atienden los percances. La reacción ante estos eventos se hace de manera eficiente. Las fallas técnicas se atienden y reparan fortaleciendo las redes, mejorando la operación de las subestaciones.
¿Cómo va la operación en lo corrido del 2018?
Este año se están adelantando inversiones para mantener y responder por los daños. Se ha mantenido un nivel de confianza en la compra y venta de energía. Los generadores la han entregado con total confianza. Y se ha contado con ella para atender la demanda representada en 10 millones de habitantes que hay en la región Caribe.
GESTIÓN EN LA CALIDAD
“Con respecto a los hechos de orden público han disminuido casi un 20%”.
“El recaudo por tarifas ha mejorado en dos puntos. Tenemos una cobertura en la compra de energía en el 2018 del 80%”.
“Para mejorar los indicadores en gestión de calidad, en el caso de un punto, en el nivel de pérdidas, se hizo una inversión anual $280.000 millones”.
“En el tema de interrupciones, la tendencia que se traía con un aumento en las horas promedio al año, se ha frenado”.
“En lo corrido del 2018, en las labores de mantenimiento, ha permitido detener
el deterioro de la infraestructura”.
alfsua@eltiempo.com