El presidente Donald Trump acabó de anunciar este martes el retiro de Estados Unidos del histórico acuerdo nuclear con Irán que los aliados de Washington consideraban era la última barrera para una carrera armamentística en Medio Oriente. Además aseguró que volverá a imponer las sanciones levantadas bajo el pacto, "Hoy anuncio que Estados Unidos se retirará del acuerdo nuclear con Irán (...). Volveremos a imponer el nivel más alto de sanciones económicas".
Quince meses después de llegar al poder, el presidente de Estados Unidos, que se acaba de pronunciar en la Casa Blanca, le dio la espalda a una gran parte de la comunidad internacional al rechazar este texto concluido en 2015 luego de 21 meses de duras negociaciones.
La reinstauración de las sanciones económicas de Estados Unidos contra Irán por su programa nuclear se harán efectivas "inmediatamente" para nuevos contratos, dijo el asesor de seguridad nacional estadounidense John Bolton, acotando que las compañías extranjeras tendrán unos meses para "salir" de Irán.
Además, el Departamento del Tesoro de Estados Unidos anunció que las sanciones a los contratos anteriores de Irán entrarán en vigor tras un período de transición de 90 a 180 días.
Bolton agregó que Washington estaba listo para discutir una solución "mucho más amplia" en torno al sensible asunto, pero también indicó que es "posible" la adopción de sanciones adicionales contra Teherán.
El mandatario se mostró dispuesto a trabajar con sus aliados para "encontrar una solución real, integral y duradera a la amenaza nuclear iraní" que también afronte sus preocupaciones sobre el programa de misiles balísticos de Irán y sus actividades "terroristas en el mundo". "Si el régimen continúa con sus aspiraciones nucleares, tendrá problemas más grandes que los que ha tenido nunca", alertó.
Trump reiteró sus habituales críticas al acuerdo firmado en 2015 junto a Irán, Rusia, China, Francia, el Reino Unido y Alemania, que limita el programa atómico de Irán a cambio del levantamiento de las sanciones internacionales. "Este era un acuerdo horrible, que solo beneficiaba a una parte y que nunca, jamás, debió firmarse. No trajo calma, no trajo paz, y nunca lo hará", sentenció.
El presidente citó los documentos presentados la semana pasada por el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, quien denunció que Irán tiene un supuesto programa atómico secreto y basó esa acusación en más de 100.000 archivos recopilados por los servicios de inteligencia de Israel.
"En el corazón del acuerdo con Irán había una gran ficción: que un régimen asesino solo deseaba un programa de energía nuclear pacífico. Hoy, tenemos pruebas definitivas de que esta promesa iraní era una mentira", alegó Trump.
El mandatario también criticó los plazos para la caducidad de ciertas restricciones al programa nuclear iraní incluidos en el acuerdo de 2015. "Si yo permito que este acuerdo siga en pie, pronto habrá una carrera armamentística nuclear en Oriente Medio. Todo el mundo querrá que sus armas estén preparadas para cuando Irán tenga la suya", indicó Trump.
El gobernante también anticipó que, aunque dicen que no negociarán un nuevo compromiso, los líderes iraníes "al final van a querer negociar un acuerdo nuevo y duradero que beneficie a Irán y al pueblo iraní. Cuando estén preparados, estoy dispuesto", dijo.
LA RESPUESTA DE IRÁN
El presidente de Irán, Hassan Rouhani, dijo que la república islámica seguirá comprometida con un acuerdo nuclear multinacional pese a la decisión del presidente Donald Trump de retirar a Estados Unidos del pacto para impedir que Teherán acceda a armas nucleares.
"Si cumplimos con las metas del acuerdo en cooperación con otros miembros del pacto, este seguirá en pie (...) Al abandonar el pacto, Estados Unidos ha socavado oficialmente su compromiso a un tratado internacional", sostuvo Rouhani en un discurso televisado.
El anuncio de Trump fue celebrado por los principales aliados de Washington en Medio Oriente: Israel y Arabia Saudita.
El acuerdo fue "una receta para el desastre, un desastre para nuestra región, un desastre para la paz del mundo", dijo el primer ministro israelí, Benajmin Netanyahu, quien se ha opuesto durante mucho tiempo al acuerdo, al elogiar la decisión de Trump.
Bajo el tratado, Irán detuvo sus actividades nucleares a cambio de que se levantaran la mayoría de las sanciones impuestas al país. Su decisión ejerce presión sobre los países europeos que son reacios a unirse a Estados Unidos para volver a imponer sanciones a Irán.