Como “previsible” fue calificado por varios analistas el incremento en el precio de la vivienda nueva en Colombia el año pasado.
Según el Dane, la variación fue de 6,09%, es decir, 2,24 puntos porcentuales menos que en el 2016, cuando aumentó 8,33%.
Al restarle la inflación del 2017 (4,09%), el alza en términos reales llegó al 2%. Gloria Bonilla, presidenta de la Cámara Colombiana de la Propiedad Raíz, señaló que “el dato no sorprendió y era previsible”, si se tiene en cuenta que desde el 2015 la corrección se ha dado en un promedio de 7,2%. Vale recordar que en el 2013 el alza estuvo por encima del 10%.
Portafolio también consultó a Juan Sebastián Pardo, presidente de la entidad financiadora de vivienda Credifamilia, quien agregó que se trata de un ajuste natural, tras un proceso de desaceleración de la economía que –aseguró– no genera ningún riesgo. Incluso, Pardo anotó que la gente está comprando menos porque hay mucha oferta y eso, en consecuencia, presiona los valores temporalmente.
Por su parte, la presidenta de la Cámara Colombiana de la Construcción (Camacol), Sandra Forero, anotó que, pese a los menores niveles de ventas de vivienda y al ajuste generalizado de la economía el año pasado, el mercado mantiene una expectativa positiva.
Según la directiva, “con este cambio en el indicador de precios promedio y la actual composición del inventario disponible, se garantizan niveles de valorización y, al mismo tiempo, el mercado se adecúa a las nuevas condiciones de accesibilidad a la oferta”.
EN EL PAÍS
Sobre el desempeño por regiones, el Dane reveló que los mayores aumentos en el precio del metro cuadrado para vivienda nueva estuvieron en Pasto (22,7%). Le siguen Cali (12,1%) y Manizales y Pereira (con 11,5% y 10,8%, respectivamente). La entidad estadística agregó que las menores variaciones positivas se registraron en Villavicencio (0,37%) y Cartagena (1,9%), mientras que la región compuesta por Bogotá y Cundinamarca reportó una variación de 3,5%, es decir, por debajo del alza promedio nacional de 6,09%.
Martha Moreno, gerente de esta regional, agregó que los datos del Dane (para la capital y el departamento) indican que los precios siguen una tendencia de variaciones moderadas y justificadas por factores fundamentales de demanda y oferta.
“Al menor dinamismo de la economía del país, que afectó el consumo de los hogares, hay que agregarle la recomposición de la oferta disponible hacia los estratos medios y bajos; esto, en consecuencia, evidencia una corrección del mercado”, concluyó la gerente regional.
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