Agosto sería un mes definitivo para el Grupo EPM, no solo para allanar el camino en la solución al percance por la emergencia de la Central Hidroeléctrica de Ituango (Hidroituango), sino para despejar la incógnita con respecto al tema de la enajenación de algunos de sus activos.
El periplo comenzaría con la clausura de las compuertas de la casa de máquinas. “La empresa trabaja en un plan que incluye: el cierre de una compuerta de captación y dejar una segunda abierta para permitir que salga el caudal ecológico hacia el río Cauca.
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Cuando el nivel del embalse esté muy cerca del punto del vertedero (cota 401 metros) se procederá al cierre de esta segunda compuerta y se interrumpirá el paso de agua por la casa de máquinas”, señala el más reciente comunicado del conglomerado.
El gerente del grupo antioqueño, Jorge Londoño de la Cuesta, explicó que la evacuación es una “condición irregular”, y una situación “indeseable”, por esto quieren clausurar las compuertas a la mayor brevedad.
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Con respecto al riesgo de caudales, EPM señala que el embalse mantiene una tendencia al descenso desde la cota máxima alcanzada el 6 de junio pasado de 393,73 metros. Cabe recordar que este miércoles, la cota se encontraba en 379,83 metros, lo que equivalen a un descenso de 13,9 metros.
El gerente indicó que aproximadamente 690 metros cúbicos por segundo están llegando al embalse del Hidroituango, y están saliendo aguas abajo cerca de 790 metros cúbicos.
“Como era de esperar, conforme el nivel del embalse disminuye sale menos agua por casa de máquinas. De acuerdo con los pronósticos hidrológicos, se estima que el embalse se estabilizará entre las cotas 370 metros y 375 metros”, subraya el comunicado de EPM.
Por otra parte, el Centro de Monitoreo Técnico que opera en el campamento Tacuí de EPM, en el Valle de Toledo, registra estabilidad en la presa.
La nota de prensa del grupo antioqueño reporta que los enrocados de la etapa tres del lleno prioritario, ubicados aguas abajo, alcanzaron este miércoles 11 de julio el nivel 415 metros, agregando unas condiciones adicionales de estabilidad estructural al lleno, mejorando su comportamiento mecánico e hidráulico. Este hito permitió iniciar el realce final del lleno a la elevación 418 metros, para una vez terminado, comenzar la construcción de la pantalla en concreto plástico.
“Esperamos que para octubre esté concluida la pantalla”, señaló Londoño de la Cuesta, y agregó que cuando lo anterior se concluya, se reemprenderían las labores de diseño para llevar la presa de 418 metros hasta la cota de 435 metros.
Técnicos de EPM avanzan en las actividades relacionadas con el reforzamiento del lleno prioritario de la presa. Para ello, se contrató a la multinacional Soletanche Bachy Cimas, que construirá la citada pantalla en concreto plástico (bentonita y cemento).
“El vertedero está terminado y totalmente operativo en sus aspectos mecánico e hidráulico para cuando se requiera”, subraya el texto.
Para el taponamiento definitivo del túnel de desviación derecho y el sistema auxiliar de desvío, personal de EPM y el consorcio constructor CCC Ituango avanzan en negociaciones técnicas y económicas con la firma Halliburton, especializada en perforaciones para la industria petrolera. Esta compañía finalizará en las próximas semanas el diseño de ingeniería para proceder con las fases de contratación y ejecución.
Londoño de la Cuesta confirmó que la próxima semana se estaría contratando un perito para que evalúe los planes de mitigación, como lo sugirió la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (Anla).
Sobre la anunciada desinversión, dijo que todavía no ha tenido la reunión con la Junta Directiva para que la administración haga la propuesta y empezar el proceso. “Para agosto se tendría eso definido”, enfatizó.